Bernard y su máquina de intercambiar cuerpos.

El doctor Gibb ha descubierto una máquina de intercambiar cuerpos. Gibb decide probar con uno de sus estudiantes, Steve, este acepta porque cree que va a beneficiarse, pero esas no son las intenciones de Gibb. Justamente antes de teclear los datos de Steve, se hace una serie preguntas, que lo ponen en duda.Otro ejemplo es cuando Aristóteles reflexionó sobre la <esencia> de Sócrates y Platón, por otr parte Locke usó el cuento del príncipe y el zapatero, para mostrar que la <identidad> tiene más relación con las características mentales que con las  físicas.Para ayudar a la pregunta de Emile, Bernar Williams inventó la máquina de intercambio de cuerpos, que podía usarse para enviar los conocimientos, recuerdos y pensamientos de una persona a otra.Con el ejemplo de Bernard, podríamos pensar lo inmoral que habría sido Gibb al intercambiarse con el joven Steve. Este enfoque nos dice como anteriormente nombré que la <identidad personal> tiene que ver con atributos mentales.

Influencia grupal

Este experimento me ha parecido algo totalmente increíble. El modo en el que una persona se deja llevar por como están colocadas las otras personas del ascensor cuando el entra, algo tan simple como eso.

Este experimento nos refleja un poco, por no decir mucho, como somos. Que nos dejamos llevar por los hechos de los demás y creemos que lo que hacen es correcto.
Puesto que si, en este caso concreto no nos diésemos la vuelta, hacia donde están mirando los demás, llegaríamos a sentirnos muy incómodos.
Nuestra vida cotidiana, el día a día, esta repleto de casos como estos. Por ejemplo, esta presión de grupo la podemos ver bien relejada en la moda, cuando tu vas a una tienda de ropa, no te compras las cosas realmente a tu gusto, te compras ´´lo que se lleva´´ o ´´está de moda´´.

Otro claro ejemplo es el tema de las bebidas alcohólicas en los adolescentes. Vemos muchos casos en los que no lo hacen porque les llame la atención o porque les guste, sino simplemente por pertenecer a un grupo de amigos, y no ser, por decirlo de alguna manera, la/el raro/a.

Para concluir, yo pienso que las personas que actúan de este modo, no deberían dejarse influenciar por los demás y deberíamos de tener más personalidad para tomar nuestras propias decisiones y saber que es lo realmente correcto y lo que no lo es.